15.12.06

Presupuestos Medusianos

El Consejo de Ministras acaba de redactar los presupuestos del año próximo que, por aclamación, serán aprobados por la Cámara.

El excelente trabajo de nuestros diplomáticos y los diversos pactos cordiales y conyugales con las naciones de nuestro entorno nos permiten reducir significativamente los gastos del Ministerio de Buena Defensa y Mejor Ataque. Los problemas internos que periódicamente plantea el desleal de turno puede solucionarlos cualquiera de nuestros Guardias Zurdos con una sardineta. En consecuencia hemos procedido a incrementar la dotación de dos Ministerios por los que este ilustrado estadista tiene debilidad: el Ministerio de Cartografía Medusiana y el Ministerio de Simbología e Idolatría.

Las lindes exactas de nuestra República son constante motivo de enconadas disputas metafísicas. Nuestro Consejo de Ancianos de Buen Ver, es decir, los Tres de Siempre, no terminan de ponerse de acuerdo en incluir, dentro de los límites de nuestro territorio, coordenadas como aquellas en las que se sitúa la Calle Mestre Ripollés de Castellón, el estadio del Helmántico, el nudo gordiano de la Araña de El Perelló (o bien toda la Araña) o el Madison Square Garden. El Ministerio correspondiente tiene por delante la compleja labor cartográfica de elaborar el mapa de un territorio que es, al mismo tiempo, material e inmaterial. El resultado podría acercarse a los diagramas de Mark Lombardi, una borgiana maraña de caminos que se bifurcan entre una mesa-máquina de coser de L'Almudí y un puesto callejero de fideos chinos en Guilin. Lo único cierto es que el kilómetro 0 de este Edén Medusiano, está situado en Palacio, en el cruce de la Avenida Sam Malone con el bulevar Rosa de España ¿qué te ha pasado? (de momento no vamos a proceder a redefinir el callejero heredado del anterior Presidente, pero todo se andará si es menester). El Presidente en persona, de reconocida afición por los garabatos diversos, encabezará el Instituto de Cartografía Medusiana.

La labor del Ministerio de Simbología e Idolatría es, si cabe, más compleja. Si bien las connotaciones sentimentales de nuestra cartografía háyanse teñidas igualmente de cierta idolatría, la materia prima de este Ministerio es pura iconicidad cargada de las filias y fobias más insensatas. Llegar a acuerdos no será fácil y mi voto siempre sumará y el del desleal sólo será tenido en cuenta si coincide con el del Presidente. En tanto nuestras pequeñas escaramuzas militares nos lo permitan iremos definiendo la composición de nuestros pendones, blasones, museos, relicarios y Gabinetes de Maravillas.

Qué bonita labor, la del gobernante esteta, cuando puede delegar las labores mas áridas de la res pública en competentes ministras o guardias civiles zurdos para dedicarse en exclusiva a aquellas que le proporcionan un gozo en el alma, grande.

3.12.06

Narg Asudem

En el día primero del mes último, tercero de mi retorno a la Presidencia de la Serenísima, la diosa visitó a Sagaz Gandul, Señor del 7, mientras Zepporro Máximo era recibido con frialdad en el paupérrimo condado de Ascensión Xirivella.

Lejos de la República, Torrija Valija Zenmaja, Nuestro Embajador Plenipotenciario en la Ciudad Permitida, recibió noticias ligeramente preocupantes de contubernios diversos y decidió regresar a su Cancillería en el Pla de la Mestra.

Todos hemos sido vanidosos.
Medusa es grande y su picor será infinito.